Un caso real de incidente aéreo, explicado por la directora de AESA, para clausurar el curso de Investigación de Accidentes de Aeronaves

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En este acto de clausura de la 10ª edición de INACCaero reciben su diploma los 48 alumnos que han finalizado este curso de formación específica de la Universidad Politécnica de Madrid.

El Curso de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aeronaves (INACCaero) de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) finaliza su 10ª edición con un acto de entrega de diplomas y una última lección, pronunciada en esta ocasión por Monserrat Mestres, ingeniera aeronáutica por la UPM y directora de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).

“La gestión de la seguridad y la investigación de accidentes”, ha sido el título de la conferencia, con la que la directora de AESA ha puesto de manifiesto la interrelación entre ambos ámbitos y cómo la gestión influye en la seguridad operacional. Lo ha hecho a través de un caso real, un incidente de incursión en pista ocurrido en el aeropuerto de Barcelona en 2014, cuando un avión tuvo que abortar su aterrizaje al encontrar otra aeronave cruzando la pista donde iba a tomar tierra.

Durante una interesante conferencia ha descrito “la anatomía del incidente”, explicando cuál era el entorno del mismo, la configuración de las pistas y los condicionantes de las operaciones, así como la forma en que se desarrolló la cronología de la investigación y la emisión de las conclusiones y recomendaciones. La directora de AESA destacó en su intervención, la importancia de disponer de un Sistema de Gestión de la Seguridad robusto.

Entrega de diplomas
Pilotos, sobrecargos, miembros de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil e ingenieros aeronáuticos, conforman una nueva promoción de INACCaero. Un total de 48 estudiantes han finalizado con éxito esta última edición, habiéndolo cursado 11 de ellos de manera presencial en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio (ETSIAE), mientras que el resto lo ha hecho en formato semipresencial, asistiendo a la Escuela las dos últimas semanas para para recibir algunas clases teóricas, realizar visitas y para la presentación y evaluación del trabajo final. Cristina Cuerno, directora de INACCaero y también directora de ETSIAE, ha destacado precisamente la calidad de los trabajos finales de los alumnos que, a través de esta formación, pueden pasar a formar parte activa de las investigaciones de accidentes aéreos, que espera desarrollen con “rigor, sensibilidad y ética profesional”.

Apoyo institucional
Las autoridades presentes en el acto han coincidido en destacar la relevancia de este curso, pues los investigadores de accidentes de aeronaves son esenciales para la aviación comercial y tienen un trabajo crucial para “garantizar los niveles de seguridad actuales e incluso mejorarlos, en un compromiso con los más de 270 millones de pasajeros que surcan los cielos cada año”, como señaló Óscar Sanguino, presidente del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA).

“La capacitación y la formación son claves para la seguridad, y esa formación debe ser continua. Necesitamos profesionales bien formados”, ha comentado la directora de AESA. En esa misma línea ha apuntado Santiago Ripol, presidente del Instituto Iberoamericano de Derecho Aeronáutico y del Espacio (IIDAE) , entidad que apoya este curso desde sus inicios: “Alcanzar la décima edición habla ya de por sí de la calidad del curso”.

También ha asistido Daniel Escohotado, presidente de la Asociación Española de Pilotos (AEP), que ha pedido a los recién titulados que “aporten su conocimiento y trabajo a los nuevos retos en automatización e inteligencia artificial, pues la industria está entrando en una fase clave para el futuro de la seguridad”.

“Este curso es fundamental para el Ministerio de Defensa”, tal y como explicó el general presidente de la Comisión de Investigación Técnica de Accidentes de Aeronaves Militares (CITAAM), Juan José González, puesto que “las tres divisiones de las Fuerzas Armadas y también la Guardia Civil, operan servicios aéreos”. De hecho, más de la mitad de los alumnos de esta edición pertenecen a las Fuerzas Armadas y a la Guardia Civil. El presidente de la CITAAM cerró su intervención recordando que “en la investigación de accidentes no se debe olvidar el aspecto proactivo y analizar también posibles causas no identificadas para evitar futuros accidentes”.


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